sábado, 30 de abril de 2011

Arepas

El mes pasado Inma subió a este blog la receta de tortas criollas. En esencia se trata de una receta muy parecida a la que yo voy a aportar hoy,  como ya dije en su día. No obstante, como esta noche he preparado unas arepas (las de la foto) aprovecho y os cuento cómo las he hecho.
He utilizado la famosa harina P.A.N., harina de maiz blanco precocida, fácil de adquirir en cualquier gran superficie española y creo que de cualquier lugar donde haya una pequeña comunidad venezolana (para los venezolanos las arepas más que un plato son casi una seña de identidad).
La receta es muy fácil:
Dos tazas de agua (mejor si está un poco tibia, no muy fría)
Aproximadamente una taza y media de harina P.A.N. o similar
Un chorrito de aceite
Una pizca de sal

En un bol se pone el agua con la sal y el chorrito de aceite, a continuación con una mano se va añadiendo muy lentamente la harina mientras se mueve la mezcla con la otra mano. Se va añadiendo harina hasta que resulta una mezcla que no se pega mucho en la mano (no demasiada harina). Se van formando bolas con un puñado de masa y después se van pasando de una mano a la otra para aplanarlas y darles forma, basta el simple gesto de pasar la bola de una mano a la otra al mismo tiempo que se ejerce un poco de presión, no hace falta aplastarla.
Mientras se va calentando la plancha (o sartén) un poco engrasada con aceite. A continuación se van poniendo las arepas recién amasadas sobre la plancha. Se dejan hasta que estén doradas y se despeguen fácilmente de la plancha. Realmente no sé calcular muy bien cuánto tiempo pero lo suficiente para que se forme esa costrita crujiente por fuera y que por dentro queden cocidas pero blanditas.
Hay quien las dora ligeramente en la plancha y después las termina de cocer unos 20 o 30 minutos en el horno.
Yo suelo hacerlas simplemente en la plancha pero si me sale mucha masa, las que no voy a consumir en ese momento las doro simplemente en la plancha y las meto en el congelador. El día que las voy a consumir las saco y las termino de cocer en el horno.
Las arepas se comen simplemente así, solas, como un pan, o bien se abren con cuidado por el borde con la punta de un cuchillo y se rellenan de lo que más te guste: mantequilla y queso, huevos revueltos, carne mechada. 
Como ya dije en otra ocasión, las arepas Reina Pepiada se rellenan con una mezcla de pollo mechado y aguacate y me encantan. Pero hay multitud de rellenos deliciosos.
Pequeña variante: en ocasiones a esta masa base le añado también un huevo, salen también muy esponjosas y ligeras y son más nutritivas. También se les puede añadir una pizca de levadura pero yo no suelo hacerlo.
A.M.R.

domingo, 24 de abril de 2011

Salmorejo (cordobés)




Ingredientes:

1 Kg tomates maduros
140 g migas de pan
150 g aceite de oliva
25 g vinagre
1 ó 2 dientes de ajo (al gusto. Yo sólo pongo uno
Sal.
Huevo cocido y jamón curado

Dependiendo de cómo vayáis a hacer la mezcla, podéis pelas los tomates y humedecer el pan. Podéis seguir los pasos del gazpacho tradicional, el de casa de toda la vida.

El procedimiento es bastante sencillo y consiste en batir muy muy bien los tomates junto con todos los ingredientes, hasta obtener una crema suave. No hay que añadirle agua, puesto que se come con cuchara.

A la hora de servir se decora con trocidos pequeños de huevo cocido y de jamón, también cortado a trocitos pequeños.

Podéis hacer un crujiente de jamón y ponérselo como una peineta. El crujiente se hace al horno o si tenéis prisa lo podéis hacer en el microondas, o en la sartén. Siempre con láminas muy finas, como las que venden precortadas.

SALMOREJO CON MYCOOK

dado que ahora tengo un ro
bot que me ayuda en la cocina, no voy a dejar de indicar los tiempos y velocidadas para hacer esta receta usando la Mycook.

Los ingredientes son los mismos que los indicados arriba, pero no es necesario pelar los tomates, ni que sea miga de pan, puede ser un bollo entero o pan con corteza, si es muy dura se le puede aññadir un poquito de agua a los ingredientes. Una vez esté todo en el vaso de la Mycook, cerrar bien y triturar durante 2 minutos subiendo progresivamente la velocidad hasta la 9.

Carmen M.R.

jueves, 21 de abril de 2011

Borrachillos (receta del papá)

Hay muchas variantes para este postre de sartén. Es primo hermano de los pestiños de otras regiones. Esta es la versión que nos enviaron nuestros padres el año pasado y que, reconozco, yo todavía no he hecho. Curiosamente, la Semana Santa para mí, en mis recuerdos, huele a cera de las velas, y al incienso de las procesiones y a la canela y al aceite frito de los roscos y los borrachillos. Y mis recuerdos se pierden entre la Túnica Sagrada y el Campeonato de Baloncesto de Semana Santa, todo ello mezclado con la harina, el vino, y el aceite de estos postres. Esa es la Semana Santa de mi infancia y hasta de mi juventud. Ahora la Semana Santa ya no es como antes.

Necesitaremos:
Aceite de oliva, 1 vaso.
Vino blanco, 2 vasos.
Anís (bebida), 1/2 vaso.
Cáscara de un limón.
Matalauva (semilla de anís), 1 cucharada.
Ajonjolí (sésamo), 1 cucharada.
Harina, cantidad necesaria.
Azúcar (para rebozar).
Almíbar (optativo)

Empecemos con lo que hay que hacer:
Primero, calentar el aceite, bien caliente. Apartar del fuego y añadir la cáscara del limón, el ajonjolí y la matalauva. Cuando se enfríe el aceite, apartar la cáscara del limón y añadir el vino blanco y el anís (la bebida).
Echarlo todo en un bol profundo y añadir la harina, poco a poco, y la que admita la parte líquida. Debe quedar una masa fina, algo correosa, pero con consistencia (como la masa para el pan).
La masa se estira con un rodillo, hasta que quede bien fina (como para hacer empanadas). Se corta en rectángulos del tamaño que se prefiera (unos 7 cm. x 3cm. está bien). Se unen las esquinas en diagonal(se puede usar un poco la imaginación también y hacer una especie de moño, liando el rectángulo por medio o unir sólo dos esquinas diagonales y dejar las otras dos libres o, incluso, hacer una especie de molinillo o dejar el rectángulo sin liar, en realidad, la forma no cambia el gusto).
Estos rectángulos se van friendo en aceite bien caliente, hasta que estén dorados. Se sacan, se escurren y se pasan por azúcar.
También se pueden pasar por almíbar (para hacer el almíbar y que quede más 'almeriense', se puede usar el zumo de una naranja y una gotita de limón, en lugar de agua, el azúcar igual que siempre. Se deja todo que hierva, como cualquier almíbar, y cuando está bien espeso, se sumergen en ella los borrachillos)

domingo, 10 de abril de 2011

Operación naranja y Carmen


Carmen, muchas felicidades, a pesar de que ya han pasado algunos días, no pienses que me olvidé, lo que pasa es que estaba más liada que la pata de un romano. He encontrado este vídeo que reúne dos cosas, la cocina y tu nombre. Lo pongo aquí, porque me parece que una sonrisa en la cocina, nunca viene de sobra.

Pipirrana


Ingredientes
- 300 g de bacalao desalado y desmigado (yo lo compro envasado listo para consumir)
- 150 g de tomates secos (una bolsa de las que venden en Mercadona estará bien)
- 2 pimientos rojos para asar
- 1 lata de atún al natural
- Cebolla dulce o cebolleta (es más dulce). La cantidad es al gusto.
- Aceitunas negras sin hueso, troceadas.
- Aceite de oliva extra
- Sal
- Huevo cocido (opcional)

[Sugerencia de presentación]

Preparación

- El primer paso es la preparación del bacalao. Si lo compráis desalado, estupendo. Si lo compráis salado, tendréis que desalarlo previamente. Para desalarlo va a depender del tamaño. Para reducir el tiempo lo mejor es trocearlo, en ese caso lo dejáis en remojo entre 12 y 24 horas en el frigorífico, cambiando el agua 2 ó 3 veces. Si el bacalao ya lo compráis desmigado, pero salado, lo podéis lavar bajo el grifo y el tiempo de remojo reducirlo a unas 8 horas, con un cambio de agua. De todos modos, para este plato, va fenomenal el bacalao desmigado en su punto de sal o desalado que encontraréis en los supermercados.

- Los tomates secos los lavamos bien y los ponemos a remojo, durante unas horas, para que se hidraten un poco.

- Asamos los pimientos y una vez fríos los pelamos y los cortamos en tiras finas. (La última vez que hice esta receta, cociné los pimientos en una bolsa de asar, en el microondas, durante unos 15 minutos, eran pimientos gordos).

- Picamos  la cebolla en trozos muy pequeños

La preparación final de la pipirrana es como la de cualquier otra ensalada. En un bol ponemos el bacalao, las tiras de pimiento asado, el tomate seco cortado en trozos, las aceitunas negras troceadas, el atún bien escurrido y la cebolla. Aliñamos con bastante aceite de oliva extra y un poquito de sal. Antes probar la ensalada sin sal ya que puede que el bacalao ya haya aportado de más.

Mezclamos suavemente y dejamos en el frigorífico (si os da tiempo).

La podéis servir sobre una fuente, o en porciones sobre tostadas, en tartaletas, volovanes, o incluso como relleno en empanada o empanadillas (muy muy picado).

                                                                                                                                           Carmen MR.

El bacalao

En Semana Santa el bacalao toma protagonismo en nuestras casas y podemos encontrarlo de formas muy variadas. Tanto en casas como en las barras de los bares es muy frecuente ver platos con bacalao seco y un montón de habas, no explico cómo se prepara esta receta, no hay más, sólo habas en su vaina, una cerveza o vino, después ya vendrán los litros de agua. Desalado, podemos encontrarlo en ensaladas, con naranjas, patatas, pasta o verduras (como la pipirrana que aquí presento). Guisado, tiene un gran abanico de posibilidades, buñuelos, tortas, tortillas,  y el famoso potaje de Semana Santa (pronto subiré una receta o espero la vuestra)…Uhmmm!!!. Fuera de estas fechas, el bacalao suele tomarme de otras formas, frito, con tomate, al pil pil, gratinado (esta la uso en Navidades por lo sencilla y resultona), pimientos rellenos, arroz.

Hay infinitas formas de preparar el bacalao pero en nuestra casa estas son las más frecuentes, además hoy “soy yo la que corta el bacalao” y no hay más que añadir.

De la Ruta del Bakalao no puedo hacer aportes, pero os dejo esta joya que os pido no os perdáis, Julito es Julito.   http://youtu.be/vcCo5Z1zAak

                                                                                                                                Carmen MR

miércoles, 6 de abril de 2011

PIZZA A MODO DI DIANA

Atención: 
Rectificar es sabio... He mejorado mi modo de hacer la pizza. Puedes ignorar esta receta y consultar la nueva haciendo click aqui.






Estas cantidades son las perfectas para la bandeja de mio horno, 30 x 25 cm.
La foto es horrible, pero yo tambièn me he quedado sin pilas en la camara a mitad, la cambiarè la semana que viene.

Ingredientes para la base:

350 gr de harina: podeis usar al menos en parte harina de fuerza (manitoba) pero en ese caso habrà que dejar reposar la masa mucho mas tiempo, incluso toda la noche. Es mucho mas rapido usar normalisima harina 00, que yo a veces mezclo con harina integral.

90 ò 100 gr de levadura natural ò ¾ de la pastilla de levadura compacta màs media cucharadita de azucar.

Un chorrito de aceite de oliva
Casi una cucharadita de sal
Agua tibia

Ingredientes para el relleno “a mi manera”

300 gr de tomate en conserva del que tiene trocitos, o de tomates pelados que tu contaràs muy fino.
125 gr de mozzarella (una)
2 anchoas en aceite
oregano y sal.

Preparaciòn

-SOLO SI USAS LA LEVADURA DE PANADERIA: disolver la levadura en medio vaso de agua tibia con media cucharadita de azucar, mezclar y dejar reposar 15 minutos.

-En un bol ancho colocar la harina, hacer un agujero en el centro como un volcàn y echar en èl la levadura natural o la mezcla del paso anterior. Mezclar con la punta de los dedos con la harina de alrededor.

-Añadir el chorrito de aceite y agua tibia, mezclando con la mano, hasta que la masa quede solida pero bastante pegajosa, màs bien mojada. Tapar el bol y dejarlo reposar unos 20 minutos.

-Espolvorear sobre la mesa un poco de harina, volcar el bol para que caiga la masa, añadir la sal y amasar muy bien (doblando, amasando, doblando y volviendo a amasar....) hasta que tome una consistencia blanda pero elastica que se pega poco o nada a la mesa y a las manos.

-Engrasar con un poco de aceite un bol bien grand, poner la masa en el centro, cubrir con pelicula transparente y dejar reposar al menos 3 horas.

-Mientras, preparamos la mozzarella: en un escurridor o en un colador grande escurrirla bien y con los dedos desmenuzarla separando las hebras de las que està formada. Cubrir y dejarla escurrir fuera del frigo. Solo poco antes de volver a la masa, cortar las hebras en trocitos pequeñisimos. Las anchoas: lavarlas, secarlas y cortarlas tambièn en trocitos pequeños.

-En la mesa enharinada, volcar la masa. Espolvorearle por encima otro poco de harina y extender un poco hacia ti haciendo presione sobre la masa con la punta de los dedos.

-Con cuidado de no romperla, pasar la masa a la bandeja del horno forrada de papel de horno. Distribuirla sin tirar de los bordes, presionando con la punta de los dedos en las zonas en las que sea mas gruesa hacia donde falte masa.

-Espolvorear directamente sobre la masa el oregano, despuès distribuir el tomate y salar. Repartir luego los trocitos de anchoa y SIN AñADIR LA MOZZARELLA meter en el horno caliente a 180°C 25 – 30 minutos. A mitad cocciòn repartir por encima la mozzarella, para que se dore pero no se queme.

Ed ecco a voi la mia pizza!!!

Diana M.R.

domingo, 3 de abril de 2011

Unas sencillas patatas fritas

Son sencillas, pero tampoco son las patatas fritas de pelar y freír, que conste. Lo que queremos conseguir es freír patatas con la consistencia de las patatas fritas de bolsa, o algo muy próximo.
Para cuatro personas, vamos a necesitar 4 patatas medianas, sal a gusto, aceite para freír y maicena (harina común en su defecto).
La receta tiene dos secretos: 1º, cómo partir las patatas; 2º, el de la maicena. Por lo demás, el sistema es exactamente igual que el que usamos siempre: aceite bien caliente y abundante.
En primer lugar, hay que pelar las patatas (si las patatas son nuevas, simplemente lavarlas bien y sacarles los restos de tierra que puedan tener), lavarlas y luego las rallamos para que queden redonditas y muy finitas (yo las rallo con mi robot de cocina, pero quien no tenga, tiene que tener la paciencia de usar un rallador), si las queréis muy crujientes las ralláis más finas (¡cuidado! no hay que rallarlas como si fuera queso o pan rallado, hay que usar un rallador de verdura). Una vez cortaditas bien finas, las secamos todo lo que podamos con un trapo bien secante. Cuánto más secas queden, mejor.
Las ponemos en un escurridor y echamos sobre ella la maicena, de manera que todas queden impregnadas, pero sin llegar a sobrar maicena (por eso el escurridor, así la maicena sobrante se irá por las ranuras), para que os hagáis una idea deben quedar todas enharinadas, pero no como para hacer bizcochos con ellas. Esta maicena lo que hace es resecarlas aún más. Procuramos que no queden pegoteadas, separamos las que veamos que se han quedado así
Mientras, hemos puesto el aceite a freír en abundancia, mejor en una freidora o en una sartén bien honda. Bien sueltas vamos friéndolas poco a poco, en pequeñas cantidades, las dejamos dorarse bien. Conforme las vamos sacando y escurriendo, las ponemos sobre un papel secante por si queda más aceite. Igual que haríamos con cualquier patata frita.
Y una vez que están fritas, les echamos la sal. ¡Antes de freírlas no echarles nada de sal!
Si a la primera no os queda exactamente como os gusta, no os preocupéis es una de esas cosas que cuánto más se hacen, mejor salen.
No sé si os lo vais a creer, pero casi he tardado tanto tiempo en explicar cómo se hacen que en hacerlas. Son mucho más fácil de hacer que de explicar.
La foto no he podido hacerla, porque la cámara no estaba cargada y para cuando se ha terminado de cargar, ya no quedaba ni una patata de muestra. Otro día.